Los videojuegos para la educación. ¿Aún crees que solo sirven para perder el tiempo?

Hace poco mas de 2 años, durante la celebración de la primera Jornada Internacional de acceso a la información promovida por la UNESCO, un joven italiano daba un discurso sobre su experiencia en el mundo de los video juegos. Su discurso comienza con una frase de estas que te dejan pensativo y despiertan el clásico público medio muerto por las horas de power point que han tenido que tragar:

Francesco dice: «Hemos hablado toda la mañana de la innovación en los medios digitales, pero no he oído hablar ni una sola vez de video juegos». Mientras yo creo de verdad que los video juegos representan una parte importante de la innovación que necesitamos, si queremos de verdad conseguir objetivos de desarrollo sostenibles»

Así que Francesco comienza hablar de historias de video juegos que ayudan a diagnosticar la Malaria, transformando en un juego la búsqueda de parásitos en las imágenes de muestras de sangre procedentes de países en proceso de desarrollo. Los datos son increíbles: una misma muestra analizada por 20 diferentes jugadores consigue el mismo porcentaje de acierto del diagnostico que el análisis de un profesional, solo que a través del juego el resultado se consigue en pocos minutos y sin coste alguno.

Así que después de despertar el publico de la conferencia con frases y resultados tangibles de este calibre, Francesco sigue enseñándoles otro juego, Papers Please, donde los jugadores se meten en el papel de oficial de aduana de un supuesto País de la Ex-Unión Sovietica durante el periodo inmediatamente después la apertura de las fronteras. Francesco subraya como el juego tenga un impacto muy elevado en los jugadores en cuanto a sensibilizar sobre el significado de tener un pasaporte y documentos en regla, permisos de trabajo y otros requerimientos administrativos, así como reflexionar sobre la migración, las fronteras, haciendo hincapié sobre como, por ejemplo, un joven europeo pueda, gracias a este juego, aprender a valorar los beneficios de vivir en la zona UE. Se trata de un video juego que, además, tuvo mucho éxito a nivel comercial hace pocos años, consiguiendo numerosos premios y reconocimientos sin tener ninguna publicidad como los que solemos ver en televisión o redes sociales.

Otro juego del que Francesco habla es This War Of Mineun juego de guerra inspirado en el asedio de Sarajevo donde el gamer por una vez no juega el papel del soldado sino el del civil que debe mantenerse en vida, buscar alimentos, refugios y curarse durante cuarenta larguísimos días.

Estos son solo algunos de los juegos que pueden hacernos cambiar opinión sobre el valor real que pueden tener los video juegos: educar y fomentar el conocimiento.

Por ejemplo, en plena época de Fake News, como no hablar de Get Bad News , un proyecto desarrollado por una empresa holandesa en colaboración con la universidad de Cambridge, que puedes jugar sin descargar y que funciona como un juego de rol, indicándote unos caminos que podrás coger según las respuestas que des, e incrementar o disminuir el número de potenciales followers en redes sociales. Esto para sensibilizar sobre el efecto que produce la publicación de una noticia falsa, que en términos numéricos se traduce en muchos seguidores para quien lanza la Fake pero también mucha gente afectada por la noticia falsa.

Otro ejemplo mas sobre temas de actualidad, el proyecto PhoneStory, un video juego que se descarga en el móvil y cuyo objetivo es reflexionar sobre el impacto de la producción de los smartphones sobre los recursos naturales y las vidas de los trabajadores implicados. Casualidad que Apple haya decidido eliminar este video juego de su app store nada mas salir al mercado.

Volviendo a la historia de Francesco, el tiene la oportunidad de hablar en una conferencia tan importante como la de la UNESCO gracias a su proyecto y su trayectoria profesional. Cuenta del concurso EduApp4Syria, financiado por la Agencia para la Cooperación y el Desarrollo del gobierno Noruego (que se llama NORAD). Bien, Francesco este concurso lo ganó, y una parte del premio de 2 millones de € ha sido destinado a el y su organización. Francesco, es Francesco Cavallari, un programador productor de video juegos que durante muchos años ha trabajado en la empresa creadora de títulos como, por citar uno, Assassin’s Creed pero que hoy gestiona Video Games Without Bordersuna asociación fundada en 2014 con sede en Malaga y que está cosechando numerosos premios en todo el mundo gracias a sus trabajos nada banales. Para comprender el impacto que produce la labor de Francesco Cavallari en la sociedad, solo cito el juego Antura & The Letters, creado gracias a la financiación del concurso EduApp4Syria. En un País como Siria, escenario actual de una larga guerra, las escuelas ya no funcionan, el sistema educativo esta completamente bloqueado y para los niños que se quedan no existe alguna posibilidad de acceder a una educación cuanto menos básica. Lo que Francesco y su equipo han realizado es un video juego para Smartphones que enseña los conceptos básicos de la lectura y escritura de la lengua árabe. Después de un inicial test de prueba en un campamento de refugiados en Jordania, el juego ha sido lanzado oficialmente y en pocos meses ha conseguido mas de 100.000 descargas (!!).

Gracias a este éxito, la asociación ha pensado mejorar el video juego añadiendo mas lenguas para ofrecer las mismas oportunidades a otros niños de zonas con dificultades, como en Afganistán (han lanzado una versión en Pashtu) a los países francofonos, anglofonos e hispanohablantes que podrán utilizar las versiones en francés, inglés y castellano. No se trata solo de ayudar países que están en guerra sino también poblaciones alejadas de los centros urbanos o que sufren dificultades temporales debido a desastres naturales o contingencias puntuales.

Video Games Without Borders no ha parado su labor viendo los resultados, y trabaja ahora en un nuevo titulo, el juego One World A Million Stories, donde la temática principal en este caso es representada por los 17 obhetivos sostenibles de la ONU (Sustainable Development Goals). El juego se basa en la narración de 17 historias diferentes, una por cada objetivo, donde el jugador deberá contribuir a conseguir el objetivo deseado aportando ideas y contribuyendo a la labor de la comunidad online. Para realizar este juego el equipo ha pasado algunos meses en Burkina Faso, y viaja ahora por todo el mundo buscando historias que puedan servir para el juego y contribuir a conseguir los resultados esperados: sensibilizar y educar.

Se trata de ciencia ficción? Seguro que nadie mas pueda conseguir estos grandes resultados solo con proponerselo? Solo te digo que muchos de los juegos de esta asociación han sido desarrollados por estudiantes universitarios, sin ninguna experiencia profesional anterior.

Así que deja ya de pensar en los video juegos como una perdida de tiempo y promueve su uso con fines educativos y científicos.

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